Ingredientes:
- 400 g de chocolate negro troceado.
- 120 ml de agua caliente.
- 2 cucharaditas de café soluble.
- 8 huevos, la yemas separada de la claras.
- 220 g de azúcar.
- 250 ml de nata para montar.
- 2 cucharadas de kirsch.
- 500 g de cerezas deshuesadas en almíbar.
- 3 cucharadas de maicena.
- 1 cucharada de kirsch.
En un cazo poner la maicena, el almíbar removiendo con una cuchara de madera a fuego lento hasta que hierva y espese. Retirar del fuego y añadir el kirsch. Tapar con film y dejar enfriar a temperatura ambiente.
Preparación:
Precalentar el horno a 180°-190°C. Engrasar una fuente para horno de unos 25x30 cm; forrar la base con papel de horno.
Mezclar el chocolate, el agua y el café en un cuenco grande resistente al calor; poner al baño maría. Con una cuchara de madera, remover hasta que se funda el chocolate y retirar inmediatamente el cuenco.
Con la batidora y las varillas, batir las yemas con el azúcar en un cuenco hasta queden cremosas. Con una cuchara mezclar poco a poco con la mezcla del chocolate ya templada.
Batir en otro cuenco las claras de huevo apunto de nieve. Incorporar las claras a la mezcla del chocolate y las yemas en dos tandas. Cuando esté mezclado verter la mitad de la mezcla en la fuente de horno. Hornear durante 10 minutos. Mientras se hornea, extender un trozo de papel de horno, espolvorear por encima un poco de azúcar. Volcar el bizcocho encima y retirar el papel que queda por encima. Cubrir el bizcocho con un paño y dejar enfriar.
Hacer lo mismo con la mezcla restante.
Batir la nata con el kirsch hasta que quede montada y firme.
Cuando el bizcocho esté frío, cubrir con el relleno de cerezas y después con la nata montada. Cubrir con el otro bizcocho y cortar con un cuchillo los lados para dejar una tarta perfecta.